Uno de los grandes interrogantes y debates que se han generado en la actualidad se puede resumir fácilmente en tres palabras: “¿Comprar o alquilar?” Existe un amplio volumen de población al que todo lo que se genere en torno a esta pregunta le importa. Saber de qué modo tenemos la posibilidad de obtener un mejor precio y ahorrar es el objetivo principal de todos ellos, que buscan reducir el porcentaje de su sueldo que destinan a la vivienda. Pero para saberlo hay que estar bien informado de lo que viene pasando en uno y otro sentido en los últimos tiempos.
Pero este tema no afecta a la gente solo en lo que está relacionado con su vivienda. También tiene una gran importancia en lo relativo a los comercios, puesto que muchas empresas tienen su sede social en un local que se encuentra alquilado. De hecho, en esta situación se encuentra la inmensa mayoría de las personas que regentan un negocio y que ven en el alquiler una manera de no atarse a un lugar concreto para la realización de su actividad. Prefieren curarse en salud y no ponerse trabas para el futuro. Lógico y normal.
El diario El Mundo ha sido uno de los que más noticias han publicado en los últimos años en relación al alquiler. Uno de sus artículos destacaba, en pleno año 2015, que el 21’2% de los españoles ya vivía de alquiler, una cifra que si bien todavía no era demasiado alta sí que refleja la necesidad de miles y miles de españoles por usar un contrato temporal de arrendamiento para no ponerse esas trabas ni desembolsar una enorme cantidad de dinero nada más hacerse con una vivienda o con un local comercial.
Madrid es la ciudad del alquiler por excelencia en España. La capital del país alberga a miles y miles de personas que, ya vengan a estudiar o trabajar, encuentra en el alquiler el medio adecuado de habitar la ciudad. Un artículo de El Mundo así lo hacía saber, haciendo referencia al mismo tiempo que la subida de precios que se ha experimentado en la ciudad está ahogando económicamente a muchas personas. Y es que esta modalidad se viene disparando en cuanto a precio dentro de los límites que engloban a la capital de España.
Cómo consecuencia de los precios tan altos que se vienen pagando en la ciudad de Madrid, muchas de las empresas que han estado afincadas en la capital se han trasladado a sus alrededores, lugares en los que poder disminuir sus costes fijos y que les permitan mantenerse cerca de un entorno tan imprescindible para una empresa como lo es una ciudad del tamaño de Madrid. Desde Fresno Inmobiliaria, una de las entidades que operan dentro del sector inmobiliario de la Comunidad de Madrid, aseguran que la tendencia de esta estampida de empresas de la capital es una tendencia que se va a mantener al alza en los próximos meses.
Una limitación que impide el crecimiento
El alto precio que muchas empresas pagan en la Comunidad de Madrid por el alquiler está poniendo en serios aprietos a más de una de ellas. El motivo no es otro que la limitación económica que ello implica de cara al resto de inversiones que deben acometer estas entidades. Si se deben asumir altos costes en materia de alquiler de instalaciones, se dejan de lado una serie de cuestiones que son las que ocasionan que las empresas catalanas, por ejemplo, estén por delante en competitividad de las madrileñas.
Hay muchas que ya se han trasladado, pero las hay todavía más que están replanteándose la situación. El Ayuntamiento de Madrid debe ser muy consciente de que, como la situación no cambie de cara a los próximos meses, el tejido industrial de la capital puede verse muy dañado. Estamos llegando a unos extremos demasiado grandes en lo que se refiere a esta situación y conviene que por parte de los arrendadores se ponga un límite a esta cuestión. De lo contrario, la ciudad pagará las consecuencias.
Es cierto que este tema ya ocupa uno de los primeros lugares en lo referido a las preocupaciones de los madrileños y que desde las administraciones públicas ya se han puesto a trabajar en ello. Sin embargo, conviene recordar que el tiempo juega en contra. Si no se pone un remedio pronto al aumento desmesurado en los precios del alquiler en Madrid, las empresas se irán a otra parte. Mientras se vayan a alguna zona de la Comunidad el problema es grave pero no mortal. Ahora bien, si esas empresas se trasladan a otras comunidades, la supremacía de Madrid estará más amenazada que nunca.