Sabemos que la cirugía estética es una rama de la medicina que busca modificar las partes del cuerpo que el paciente quisiera mejorar para lucir una mejor apariencia o una que les haga sentir mejor consigo mismos, esto ya sea a raíz de alguna malformación congénita o tumoral, o solo por pura razón de estética.
En cualquier caso, cualquiera que sea la razón que nos lleve a someternos a una operación estética, lo que si siempre buscamos es que esta tenga los resultados más naturales. En cuestión de estética, la naturalidad es lo que más importante.
Por ejemplo, en España se llevan a cabo unas 400.000 intervenciones quirúrgicas estéticas cada año, con un 80% de pacientes mujeres y con un gasto medio cercano a los 2.000 euros. Por esto, nuestro país se sitúa en el quinto lugar mundial en este tipo de operaciones, siendo los cirujanos plásticos españoles de los mejor considerados a nivel profesional. Esto debido a que siempre buscan la naturalidad como resultado en todos sus casos.
Así, estos datos nos llevan a pensar en la importancia de este sector en el mundo de ahora. En palabras de un experto en materia, el doctor Mario Secorun , en una entrevistas con La Voz Digital:
“Actualmente se vive en una época en la que la apariencia física es muy importante; sin embargo, las intervenciones que se llevan a cabo sobre el cuerpo no siempre son las que se deben hacer, no se ejecutan de la manera correcta o no las realiza quien debe realizarlas”
Acompáñanos a ver, de la mano de expertos en la industria, la realidad actual del sector en su búsqueda por la naturalidad estética.
La industria de la cirugía estética de hoy en día
Uno de los principales problemas con los que lucha la industria de la cirugía estética hoy en día es la tasa tan alta de intrusismo laboral que existe. Es decir, la gran cantidad de médicos y clínicas no cualificados y con poca o nula experiencia que se ofrecen al público como grandes oportunidades para el cambio estético que tanto buscan y que al final terminan dejando una estela de malos procedimientos a su paso.
Por lo general, este tipo de servicios se vende a través de precios muy económicos, pero resultan en operaciones nefastas, malformismos, y hasta problemas de salud grandes en muchos de los casos.
Secorun, añade: “Es fundamental para cualquier paciente contar con un cirujano plástico profesional que pueda ofrecer garantía, seguridad y experiencia”.
Lo más popular del mundo de la estética
El mundo de la estética recibe peticiones de todos los tipos, sin embargo, hay unos procedimientos que figuran como los más populares.
Entre estos tenemos a las mamoplastias, en las que se puede dar forma, reconstruir una mastectomía, reducir, aumentar o levantar el pecho, pero siempre con el objetivo de mantener la morfología natural.
Además de la mamoplastia, las otras intervenciones más realizadas son la rinoplastia y la queiloplastia. Esta última es la cirugía que se lleva a cabo para la armonización de los labios y que tan popular se ha vuelto hoy en día.
En cualquiera de ellas, el paciente lo primero que busca es que la modificación estética luzca lo más natural posible, y es que nadie quiere caminar por ahí como si llevara un cartel que diga “me he hecho una operación”.
Para que esto no suceda es imprescindible asegurarse que el cirujano está correctamente titulado; y que ofrezca una experiencia que nos de garantía y seguridad en los resultados; e igualmente sucede con la clínica en la que nos realizaremos la cirugía.
Para lograrlo, hay que enfocarnos mucho en la fase diagnostica del procedimiento. En ella el paciente debe valorar con el cirujano las diferentes opciones que tiene, dejándose asesorar por el mismo, e incluso, pidiendo una segunda y tercera opinión para comparar experiencia, precio y calidad. Solo de esta manera podremos constatar que tanto sabe la persona en cuyas manos nos pondremos.
Por lo general, un punto en el que hay que poner mucha atención es en el prestigio del médico y de la clínica, mucho más de en que procedimiento usa. Muchos paciente se dejan llevar por la promesa de un procedimiento menos invasivo y por lo tanto, económico, en vez de constatar la experticia del cirujano plástico.
“Hay que tener mucho cuidado con el lugar de la operación si no se realiza en un quirófano de un centro hospitalario o una clínica con todos los recursos necesarios para afrontar cualquier complicación o emergencia”
La importancia del estudio preoperatorio
Siempre que se realiza una intervención debe haber un estudio preoperatorio previo. “Debe incluir pruebas radiológicas y las analíticas necesarias; y el cirujano debe entregar un documento de consentimiento antes de la intervención, dado que en la mayoría de las operaciones se precisa de anestesia y en muchos casos será general”.
Además de que se debe haber hablado y pautado las sesiones de seguimiento que conllevan muchas de las operaciones estéticas, en las que el médico confirmará que la recuperación del paciente vaya según lo acordado y que los resultados se estén mostrando como se pautó.
De hecho, es tanta así la importancia de la fase de diagnóstico que muchas clínicas, para mostrase más competitivas ante la competencia, la ofrecen sin costo alguno a sus pacientes.
Hacer un buen diagnóstico en estética es imprescindible para que los médicos puedan recomendar los tratamientos que mejor se adecuan a los requerimientos del cliente y que mejor pueden ayudar a resolver con éxito su problema estético.
Hoy en día existen cientos de tratamientos para un mismo requerimiento, y no todos son los más recomendables para todos. De hecho, en la selección de la técnica apropiada es donde más yace el logro de los resultados más naturales.
¿Cómo es un diagnóstico completo?
Medyglobal, expertos en cirugía estética nos comentan como son los pasos hacia un diagnóstico completo que garantice resultados satisfactorios y naturales:
- Entrevista
En el primer paso el médico debe tener una larga conversación con el paciente en la que deberá escuchar con mucha atención que es lo que este busca con la intervención y preguntar ciertos aspectos de su vida a detalle, que sean de relevancia para determinar cual es el tratamiento que mejor se acomoda a su caso, como por ejemplo, sus hábitos de vida diaria, sus aspiraciones estéticas y otros más.
Esta primera sesión debe tomarse su tiempo y ser organizada en un lugar cómodo y privado, sin apuros ni distracciones, en donde te puedas tomar el tiempo suficiente para realizar un reconocimiento completo del cliente y prestar la mejor atención individualizada.
- Recogida de datos
Ya se trata de armar la ficha del paciente con todos los datos que debes saber para tenderlo de la forma más profesional posible. Estamos hablando de su nombre, apellidos, teléfono y email, al igual que otra información tan importante como su profesión, el tipo de tratamientos en los que está interesado, personalidad, preferencias y particularidades. Así se deben completar los siguientes campos de información:
- Información de carácter médico de interésen las que incluimos las enfermedades actuales, pasadas y antecedentes, la medicación que toma, operaciones, alteraciones cutáneas, si ha pasado por embarazos y partos y cuántos, si sus menstruaciones son dolorosas, si ha tenido acné y de qué tipo, si tiene alergia a algún medicamento o a algún tejido, entre otras.
- Hábitos de vidacomo si consume tabaco, alcohol o drogas, cómo es alimentación, hidratación, rutinas diarias o actividad física y de qué intensidad, etc.
- Experiencia del cliente con otros tratamientos o productos. Por ejemplo si ha tenido intolerancias, reacciones, sensibilidad, molestias u otros.
- Personalidad. Hablamos de saber si es paciente y calmado, si es muy activo, si quiere resultados ya y busca lo mejor, si tiene un carácter fuerte y dominante, etc.
- Exploración y observación
Una vez hayamos completado la recolección de todos estos datos pasamos al paciente a una revisión física para evaluar su piel en base a las necesidades de cambio que ha expresado.
En esta exploración el médico podrá encontrar marcas y manchas, nivel de grasa en la piel o acumulada en distintas zonas, su nivel hidratación o sequedad y en qué áreas, las zonas más conflictivas y su estado, si existe algún tipo de dermatitis, si hay cicatrices y de qué tipo, cuál es fototipo del pelo (en el caso de depilaciones con láser), etc.
Así, entre la información de la entrevista y la exploración visual el médico podrá dar con un diagnostico completo, el cual, una vez hablado y aprobado por el cliente, este debe firmar y dar la autorización para el tratamiento del sus datos tanto personales como médicos.
Solo pasando por todas etapas se puede garantizar que el médico es un profesional certificado, que sabe los pasos a seguir para una intervención exitosa, y que está alineado contigo y tu necesidades, ofreciéndote no lo mejor del mercado, sino lo mejor para ti y lo que quieres lograr, y a un precio que de verdad pague por la calidad y seguridad del servicio brindado.