No es necesario tener que esperar a una fecha señalada como las Navidades para tener un detalle con los empleados de nuestra empresa. Se trata de una acción cariñosa que no tiene por qué ser cara y que, además, supone una motivación extra para los trabajadores, que están sufriendo especialmente los efectos de esta crisis económica con recortes salariales, ampliaciones de jornadas laborales y pérdida de derechos, entre otros. Así, para dejarles claro que reconocemos sus esfuerzos, podemos gratificarles con algún detalle y, en caso de ser una compañía de pocos trabajadores, podemos incluso echar mano de regalos personalizados, de forma que todos sientan la atención por nuestra parte.
Una de las formas más sencillas y baratas de tener este tipo de detalles puede ser aprovechándonos de nuestros productos. Por ejemplo, si tenemos una editorial, podemos regalar un libro o una colección de libros que nos hayan sobrado de ventas anteriores; si somos propietarios de alguna empresa de ropa y complementos, una cartera para los hombres y un bolso para las mujeres podrían ser una buena opción. Además de entregar muestras de nuestros productos a los empleados, otra solución para abaratar o conseguir productos gratuitos es llegar a acuerdos con terceras empresas. Un ejemplo de esto lo tenemos en los medios de comunicación. Un periódico puede formalizar un contrato con una compañía que quiera anunciarse en él en el que incluya en el pago los productos de esta empresa externa. En la época de Navidad, si una compañía quiere anunciar sus rebajas y se trata de un fabricante de cervezas, podemos pedir que parte del pago de la publicidad sea por un pack de botellas que regalar a nuestros empleados, o un descuento en las cestas de Navidad si se trata de una empresa que distribuya estos productos y si nuestro presupuesto alcanza para hacer este tipo de regalos.
Pero existen muchas más opciones si contamos con un pequeño presupuesto destinado a obsequiar a nuestros trabajadores haciéndoles partícipes del proyecto empresarial que desempeñamos. En la época navideña, que es una de las que más se presta para llevar a cabo este tipo de acciones, podemos recurrir a la cesta si tenemos dinero o ser originales y regalar un décimo de lotería, fomentando la ilusión en los trabajadores. En el peor de los casos, cuando incluso el boleto nos resulte caro, podemos también hacer participaciones del número que hayamos comprado y repartir así más el presupuesto. Una botella de vino o cava es también una opción socorrida para estas datas, cuando es común que en todas las casas que aumente el consumo de comida o de bebida.
Siguiendo con el hilo gastronómico, un regalo que no tiene fecha y que es adecuado organizarlo en cualquier momento consiste en invitar a los empleados a una cena o a una comida, y además sirve de forma de hermanamiento entre compañeros. Incluso podemos aprovechar la ocasión para dirigirnos a todos con un discurso informal en el que agradezcamos su labor y dejemos patente nuestro reconocimiento a su trabajo.
Si nos ha pillado el toro porque queremos entregar el presente en alguna fecha señalada, como un aniversario de la compañía, existen empresas que se dedican a ofrecer ideas de productos y también la personalización de los mismos, como pueden ser bolígrafos grabados con el nombre de los empleados, estuches con gemelos o relojes, entre otras muchas ideas adaptadas a todas las ocasiones y a todos los presupuestos.
En definitiva, independientemente del presupuesto, si tenemos la intención, podemos mostrar fácilmente agradecimiento a nuestros empleados y también dejar claro que reconocemos su trabajo. Existen ideas para todas las situaciones y bolsillos.