Formo parte de la Junta Directiva de un equipo de Segunda División, un equipo que trabaja por la cantera y que, por tanto, estaba interesado en ampliar su ciudad deportiva con más terrenos de juego. Necesitábamos uno con un césped artificial que resultara cómodo para los chavales y que redujera el número de lesiones, que había sido muy alto durante la temporada anterior. Nos informamos pormenorizadamente acerca de empresas que nos pudieran suministrar un producto como el que nos interesaba y vimos en Niberma, esta empresa de
resinas para suelos, construcción de pistas de pádel y demás productos para instalaciones deportivas, la solución ideal para nuestros problemas.